El Ministerio de Salud alertó sobre un incremento acelerado de contagios en 5 provincias del país: Galápagos, Azuay, Manabí, Pichincha e Imbabura; asegura que la transmisión de COVID-19 en Ecuador se mantiene desde marzo de 2020 en una fase de transmisión comunitaria, es decir, que las autoridades no logran establecer el origen de los casos porque el virus circula en la comunidad.
Por ejemplo, Galápagos llegó a los 2.563 pacientes por cada 100.000 habitantes, mientras que la tasa de contagios en Azuay es de 1.392 casos por cada 100.000 habitantes. En Pichincha, que con 71.024 casos confirmados es la provincia con más contagios del país, y también con la tasa más alta del continente, con 2.198 por cada 100.000 habitantes.
Según el exdirector médico del Hospital Carlos Andrade Marín, Mauricio Espinel, la transmisión comunitaria es particularmente delicada en un mes de alta movilidad de personas como diciembre. “El SARS-CoV-2 es un virus que se mueve con las personas. Entonces, si hay más traslados, la posibilidad de contagio se incrementa”, dice el médico. El ministro de Salud, Juan Carlos Zevallos, insiste que los hospitales públicos están preparados para recibir a nuevos pacientes en el caso de un nuevo despunte en los contagios, sostiene que estos pacientes son los causantes de la mayoría de los nuevos brotes, pues algunos de ellos al creer que están sanos relajan las medidas de bioseguridad.